​

Desde mi infancia, he sentido una atracción innata hacia la espiritualidad. A pesar de leer numerosos libros y consultar con muchos profesionales persistía en mí una sensación de vacío, como si algo esencial estuviera ausente, sin saber exactamente qué ni cómo buscarlo.

Convencida de que algo trascendental se me escapaba, inicié mi búsqueda espiritual durante la adolescencia, explorando libros sobre meditación, energías y sanación. A medida que incorporaba terapias a mi vida, sentí la necesidad de formarme en ellas para aplicarlas en mí misma, aunque la sensación de vacío aún perduraba.

Un día, una voz clara me susurró: 'Lo que buscas no está fuera, sino dentro de ti. Es parte de lo que eres, es tu VERDADERO SER''. Fue entonces cuando sucedió la magia. Aprendí a conectarme con mi esencia, a reconocerme y a aceptar la verdad de quién soy. La consciencia floreció en mí, revelándome claramente cuál es mi propósito en esta vida: ¡Guiar a las personas para que encuentren sus caminos desde la sencillez de su esencia!

 

¡Lo que viví lo viven muchísimas personas!

 

Por eso he decidido usar estas herramientas, que tanto me sirvieron, para ayudar y guiar a los demás. Porque ahora sé que cuando queremos algo, debemos buscarlo en nuestro interior.

​

Quiero ayudar a todas las personas que lo deseen, a que se  reconozcan de una forma sencilla y  efectiva, para que aprendan a confiar en sí mismas desde el primer momento; para que su camino de aprendizaje sea el más adecuado y eficaz para su evolución y crecimiento personal.

​

Cuando me embarqué en mi viaje espiritual decidí escuchar mi voz interna, permití que mi corazón me guiase siempre para que mi camino y mi destino fuesen cada día más claros.  Aceptar mi espiritualidad fue el gran salto para comprenderme a mí misma y sobre todo para aprender a no juzgar a los demás.

​

Para estar despiertos es necesario saber realmente quiénes somos.

¡Es en esta certeza donde despierta la confianza en esta sabiduría invisible e infinita que todo lo puede!